TEJERO by AYUSO 

Había una vez un personaje al que no le gustaba la España en la que vivía y decidió acabar a tiros con la situación. Ese personaje era Ayuso, digo Tejero, al que no le gustaba el jefe que pretendía gobernar el país. Ocupó el parlamento, digo Génova 13, y pronto vió como su objetivo se quedaba tieso sentado mientras todos los demás se escondían sabiendo que aquello acabaría mal. 

El tal Suarez, digo Casado, intentó mantener el tipo, pero pronto se dio cuenta de que Tejero, digo Ayuso, no estaba sola, sino que los principales personajes de España, desde al Emérito hasta Armada, habían decidido acabar con él y ocupar su lugar, algo semejante a lo que 41 años después le pasaría al que se imaginaba poderoso dueño de Génova 13. 

 

Tejero, digo Ayuso, supo que había conseguido su objetivo de derrocar al presidente, aunque no sabía si escaparía por la ventana, cuando los poderosos dijeron que el teatro se había acabado, o acabaría en una prisión confortable por atreverse a soñar que ella era la dueña del cotarro. Hubo manifestaciones para apoyar a Tejero y Armada, como pasaba hace unos días después de décadas, pero nunca les dejaron asomar la cabeza para tomar el control de la nación. 

Quienes acabaron con Suarez, digo con Casado, sabían muy bien lo que querían y lo llevaron a cabo en poco tiempo dando la impresión que nos salvaban de la llegada del ejército, digo de VOX, y así convertirse en los buenos. 41 años después quienes mueven los hilos siguen ganando desde el anonimato y quedan como buena gente que vino a salvarnos. Suarez, Tejero y Armada, digo Casado, Ayuso y Egea, harán escarceos para mantener el tipo, pero perdieron lo que soñaban y el Emérito y los poderes fácticos quedaron como reyes cuando fueron los que propiciaron el golpe de Estado. 

Tristes historias repetidas que entretienen, más que solucionan, a los de abajo con medios de comunicación afines que imponen sus deseos, los que imponen sus dueños pues ellos nunca son culpables de nada....