ESTOY TRISTE, MUY TRISTE

      El debate del parlamento catalán ha acabado con mi escaso optimismo político.

Yo creo que algunos no necesitan un referéndum ni el derecho a decidir porque ya se creyeron hace tiempo que ellos son los mesías que salvarán a la patria.

QUIERO UN PAÍS PARA MI SOLO

Creo que durante estos meses he expresado con claridad lo que pienso sobre el proceso independentista y el derecho a decidir que han puesto en el tablero aquellos que fueron votados. Es una manera irónica de olvidar los problemas de cada día del pueblo, ese pueblo que les llena la boca, de aprovechar una coyuntura de crisis para intentar ganar con ella lo que no podrían conseguir en esta sociedad en circunstancias económicas normales y de, en nombre de la democracia, olvidar cualquier camino que respete la opinión de las personas.

Hoy me siento triste porque he sentido cosas raras, muy feas, deprimentes. Os lo cuento sin callarme ni una, aunque a algunas personas le molesten mis razonamientos y sentimientos. He visto un ensayo para crear dos bandos enfrentados que intentarán desacreditar al contrario y hacernos vivir en una sociedad dividida, porque tarde o temprano acabará calando en el día a día de la convivencia. Un intento de quemar etapas, sin importar los medios, con unos tintes de fundamentalismo que a mi me han asustado y no me asusto fácilmente. He percibido gente muy peligrosa moviendo los hilos de esta historia, quizá algún día deseen que nos vayamos todos los que hicimos de este país nuestro hogar, hoy he sentido en sus palabras algo que me ha dado repelús, vergüenza y pena. Les he visto capaces de mandarlo todo a la mierda con tal de conseguir su único fin, la independencia.

Personas que no creían en las fronteras ahora mean para cavar una nueva. Personas que tenían cuatro votos ahora se creen don quijotes catalanes defendiendo el honor de TODOS los habitantes de Catalunya. Estas personas, pienso, nunca aceptarán perder un referéndum, se creen mesías de un paraíso del que está prohibido dudar. Son pocos pero tienen la alcachofa y el sueño del poder y la poltrona, quieren escribir la historia… ¡Qué miedo!

Al menos he comprobado que no me equivoqué al votar al PSOE, en contra de mis ideas, en las últimas elecciones. Ha sido la voz de la cordura en un mundo pequeñito donde los demás querían juntarle con el PP. Es CiU la que ha estado siempre junto al PP, sabemos que son los mismos con diferentes collares.

La postura de ICV –iniciativa- increíble. Creo que van creciendo los meapilas y monaguillos en este país. Si algún día les creí aceptables hoy han acabado en el pozo más hondo y oscuro. ¿De verdad creen que pueden esperar los desahucios? ¿De verdad los jóvenes de este país se van a quedar huérfanos hasta que dentro de no sé cuantas décadas quizá alcancen algo parecido a independencia? La gente pide trabajo, sueldos correctos, seguridad, visos de futuro para los de abajo… menuda compañeros de viaje se han echado.

Ahora a esperar como mueven las dos partes el cotarro. Se acercan tiempos tristes y complicados. Los fundamentalistas no solamente son los talibanes.