viernes, 24 de enero de 2020

OLVIDAMOS LO IMPORTANTE 
Hay que renunciar a muchas cosas para salvar el Planeta. 
Y los poderosos no están dispuestos a dejar de dominar el mundo. 
Hablar, hablar... fechas, fechas... congresos... marear la perdiz. 
Hoy contento: un relato mío premiado en Zamora... 

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Reciclamos con la mejor voluntad del mundo, algunos van andando o en bicicleta al trabajo, otros dejan el coche en casa y van en transporte público, muchas personas se han concienciado de que el problema de la Tierra es serio y que no aguanta los envites de los humanos. Hasta nos sentimos bien cuando bajamos unos grados la calefacción o controlamos el aire acondicionado y nos hacen sentirnos culpables si tenemos un coche de gasoil que nos vendieron como una ganga limpia. 
Ellos hacen una cumbre en el lugar del Planeta más insospechado y doscientos aviones surcan el cielo contaminando mil veces más que los coches, la calefacción o el aire acondicionado que nosotros ahorramos. Sus conclusiones son para el año 2025 o para el 2050, no tienen prisa en aplicar energías limpias porque el petróleo les da poder y control sobre las sociedades. Trump, China, India, occidente no están por la labor de aplicar sus inventos a la conservación de la Tierra, es más importante hacernos depender de sus armas de destrucción masiva (las de la energía y las de los tanques). 
Occidente, indecente, se niega a entrar directamente a resolver el problema e intenta que los países en desarrollo no tengan la idea de hacer lo mismo que han hecho ellos (nosotros) durante siglos. El consumo impuesto a la sociedad provoca el movimiento de millones de contenedores cada día que contaminan el aire y los mares, hemos ido a explotar a los países pobres para que produzcan más barato después de haberles robado sus materias primas durante cientos de años.  
Seguirán hablando, quemarán bosques e inundarán playas, acabarán con los polos y será cada día más difícil respirar el aire de las ciudades en las que nos han obligado a sobrevivir. Los poderosos guardan sus inventos, ponen trabas a las energías limpias, no reponen los árboles ni eliminan los plásticos, pero prometen medidas para salvar el Planeta cuando ya no haya medicinas que puedan hacerlo habitable. 
Cada día cuesta más hablar con la luna y soñar...

Nota: Hoy que dieron un premio literario en Zamora, cuando me dejen lo publicaré en el blog. 

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