ROUCO, ¿CÓMO PODREMOS SALVARNOS SIN TI?

Son seres ungidos de la verdad que intentan imponer sus ideas a los demás.

Este personaje, el puto jefe de los obispos españoles, es un dechado de virtudes y nadie pide cárcel para tan patente terrorista…

                               

            Este Rouco es el puto jefe de los obispos españoles y arzobispo de Madrid…

            Rouco es un primate carpetovetónico, agresivo, reincidente delincuente y terrorista de secta peligrosa con seguidores llenos de la fuerza de la fe. Nacido hace 77 años hemos querido despedirle con honores pues ni cuando se marche o le echen está dispuesto a dejar de dar la lata. Su tesis doctoral ya versaba sobre las relaciones de la iglesia con el Estado…en el siglo XVI, resumiendo, el estado no tiene derecho a existir si no respeta lo que Rouco, en calidad de iglesia, piensa con la mentalidad del siglo que estudió.

            Hoy ha decidido aumentar la lista de independentistas al meter la pata donde nadie le llamaba. Se ha convertido en evangelista de la constitución española, una constitución impuesta, dañina y reformable, no como los evangelios que él utiliza. El resto de su discurso versa sobre principios de fe:

-         El aborto es un asesinato despiadado y cruel a una criatura indefensa.

-         El matrimonio es para siempre y están excomulgados quienes se separen.

-         La homosexualidad es una enfermedad, contagiosa si no es eclesial, y no puede consentirse que dos enfermos se junten.

-         ¿A quien se le ocurre dejar a un niño en manos de homosexuales?

-         Si Jesús, hace 2000 años, eligió 12 hombres de apóstoles es porque estos tienen un don que no tienen las mujeres… (olvida que había esclavos, ignora que en la iglesia, siglos después, se discutían si tenían alma las mujeres…). ¿Cómo pueden convivir las mujeres con estos mensajes en el s.XXI?

-         Dame las perras y calla. ¡Qué siga el concordato! ¡Paga la educación que es la pasta gansa de mi iglesia! ¡No me cobres impuestos o te vas al infierno!

-         Déjame adoctrinar a los españoles y te entregaré esposas sumisas que servirán al varón y varones sufridores que rezarán cuando les manden al paro o les bajen el sueldo.

Las otras burradas, que son delitos, me las callo hoy que solamente quiero despedirme y agradecerle haber alcanzado yo la certeza de que fuera de su secta tengo más posibilidades de ser buena persona. No intentaré imponer a nadie mis creencias con leyes excluyentes.

Rouco no habla de los parados, de la precariedad laboral, de los ricos cada día más ricos, de hacer colegios de élite en las barriadas, de llenar los bancos de alimentos con sus tesoros, no condena a la derecha cuando retira fondos para luchar contra la enfermedad y la pobreza, no va a impedir los desahucios pero defiende la vida, no habla de rebelarse contra la injusticia porque quizá le molieran a palos. ¡Tantos silencios, Rouco! Eres malo, muy malo… no llegarás a ser el 523 de los beatos mártires de la izquierda aunque llevaras a Franco bajo palio…