jueves, 15 de junio de 2017

HACE CUARENTA AÑOS…
Un teatrillo para salir ilesos de una sanguinaria dictadura.
Aquellos insignes personajes triunfaron bajo el miedo a los fusiles y con una monarquía impuesta por el dictador que tuvo al país sin poder decidir 40 años.
El triunfador, Suárez, era un falangista que Franco había tenido de ministro de “su movimiento”
                        Resultado de imagen de fotografias de las elecciones de junio de 1977
  
            Son historias de abuelos pero que vuelven a tener actualidad estos días porque comienza a ponerse en cuestión la Constitución que montaron los vencedores en aquellas primeras elecciones permitidas por el franquismo. Eran tiempos de ilusión pero también de miedo, de hecho quienes con más tesón se habían opuesto a la dictadura, el partido comunista, apenas tuvieron representación en la Cortes (20 escaños) y fueron barridos por un pactista partido socialista. El bipartidismo que hemos soportado durante cuarenta años se montó en este primer paseíllo por las urnas.
            Cuando se legalizó al partido comunista (después de aceptar la monarquía y  cuantas cosas le pidieron a Carrillo) los militares enseñaron los fusiles y la gente entendió (viniendo de dónde veníamos) que eran capaces de volver a la calle y comenzar a fusilar a quienes con ellos no comulgaran. Eran tiempos de silencios, de desaparecidos, de falangistas, de cunetas, los que se querían enterrar y no era fácil creer que dejaran volver a la República y al Frente Popular sin sacar los tanques a la calle de nuevo.
            Veíamos con ilusión como algunos políticos se atrevían a atacar el franquismo y nos prometían una libertad que sabían que no tendríamos (Felipe González era el que llenaba polideportivos y nos hacía vivir en la esperanza) porque ya tenían pactado perdonar a los asesinos (amnistía) y dejar a la derecha y a la extrema derecha sus sillones y el poder. Se votó por primera vez para que siguieran mandando los que con un golpe de Estado habían secuestrado las urnas en 1936.
            Desde entonces ha llovido mucho, se han alcanzado grados de libertad  y derechos que debemos no olvidar que estuvieron encarcelados muchos años, el mundo occidental ha progresado, y nosotros con él, hasta unos niveles de bienestar que no se podían soñar y la crisis nos debería hacer valorar lo que hace muy pocos años teníamos y nos intentan quitar con mentiras y patrañas. Lo que creo que deberíamos poner en cuestión es aquella constitución que nació bajo la amenaza de los fusiles y que es hora de revisar de arriba abajo.
            Quizá algún día pueda retornar la República que nos robaron, aunque lo tenemos difícil con estas izquierdas apoltronadas que no necesitan fusiles que les amenacen para ver con excesiva pasividad cómo nos roban derechos y libertades.
               Ahora tampoco... pero no penséis que entonces había libertad de prensa.

Nota: A la derecha de los falangistas azules se presentaba Fraga con su Alianza Popular, aquella que acogería en sus juventudes a Cristina Cifuentes. Sin comentarios.



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