BUSCANDO A QUIEN VOTAR

Sabido es, por repetido, que no soy independentista.

No es día de explicar que cada día estoy más convencido de mis ideas.

Vamos a buscar entre lo que queda para elegir mi papeleta…

                     

     

            Si no eres independentista lo tienes difícil para que alguien entienda tu voto. Tampoco existen muchas opciones para quienes creíamos militar en el bando de la izquierda. Porque van reduciendo la oferta y tachan de fachas a quienes dieron lecciones de democracia sobrada en el pasado. Muchas de las cosas buenas que disfrutamos (educación, sanidad…) no cayeron regaladas sino que fueron conquistadas por las personas con la ayuda de algunos gobiernos en el pasado. Y algunos de los que hoy gritan eran oposición cerril a cuantas conquistas sociales se proponían, y no habló ahora de Madrid.

            Quedan lejísimos de mis manos las papeletas de Ciudadanos y del PP, siempre lo han estado y en este caso con más razón porque creo que contribuyen a crear más crispación y poco tienen que ver con las ideas sociales que pregonan. Son la gran derecha, mezclada con la extrema derecha, que no necesita muchas explicaciones para pensar en otra cosa.

            Yo era ferviente seguidor de aquel 15M y me ilusioné, como hace muchos años con González y su partido anti OTAN, republicano y socialista, con lo que traía PODEMOS al que acostumbro a votar a nivel nacional. Dentro de lo que tenemos es quién parece dispuesto a enfrentarse con la apisonadora europea que provoca recortes y desigualdades sociales. Pienso seguir haciéndolo si mantiene  sus ideas, porque creo que ha contribuido a destapar la corrupción y ha traído aire fresco a una política alejada de los ciudadanos, pero solamente a nivel estatal.

            En estas elecciones el tema de la independencia es esencial y PODEMOS ha elegido un lugar que a mí me parece tan irreal como el secesionista y que contribuye a seguir alimentando la situación insostenible actual. 
                - Ellos no dialogan, aquellos piden imposibles, fachas, antidemócratas, ilegales, cárceles, violencia… queremos un referéndum y dicen que no nos lo pueden dar. 
            Un referéndum pactado no me parece viable en estos momentos e imposible de alcanzar con la correlación de fuerzas existentes en España y en Europa. Soñar escenarios debe ser bonito pero yo no alcanzó a ver la ventaja de perseguir imposibles. Los problemas reales tienen otros tiempos.

            Mañana intentaré explicar que ni el 155, ni el respeto a la Constitución y las leyes existentes es de fachas o de personas intransigentes o antidemocráticas. Aunque estaba lejos de los socialistas, por sus últimos gobiernos y por la impresentable actuación de la mayoría de sus dirigentes, estoy pensando en depositar, bailando, mi voto en la urna de Iceta.