miércoles, 21 de marzo de 2018


LA MEMORIA DE LOS CORRUPTOS
Todos ellos padecen una amnesia muy contagiosa.
Una presunta ha olvidado hasta que se presentó a unos exámenes y defendió su trabajo para conseguir un master.
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            Desde Mato hasta la infanta la amnesia parecía algo casual, una enfermedad propia de personas que no hablaban con sus maridos ni veía los gastos de sus casas. Con el tiempo ha ido extendiéndose a cuantos pueden tener una coartada para saltarse la ley y evitar que se les castigue porque no se puede llegar a demostrar su culpabilidad. Es realmente vergonzoso que los políticos, seres que dicen sacrificarse por el bien común, mientan de una forma tan grosera y no se hagan el favor de dejar de ser altruistas e irse de la cercanía del dinero público.
            Todos los que tienen poder en los partidos, especialmente en el PP que atesora cientos de casos, se han parapetado en otras personas y has tenido la picardía de gestionar su vergonzosa conducta en su palabra  contra la de su inmediato “súbdito”. Así podemos asistir a múltiples acusaciones que acaban dejando por mentiroso a quién denuncia las tropelías (o trabajando dignamente de conserje) e inocente bajo mil sospechas a quienes idearon y llevaron a cabo el robo en el erario público.
            Las comparecencias en el Congreso parecen una pasarela para que se defiendan los sospechosos, este país tolera que personas que han estado muy cerquita de la comisión de delitos nos cuenten que no oyen y mucho menos ven lo que tienen delante de las narices. Cualquier político de la cúpula de los viejos partidos ha tenido que callar, no ver ni oír miles de comentarios sobre comisiones, adjudicaciones y sobres, saben lo que ha pasado y deberían comenzar a regenerar la vida política para que no vuelva el desencanto.
            Lo de Master de Cifuentes es de sobresaliente, no sé cómo solamente le dieron notable. Ella dice que no se presentó a dos asignaturas en un año determinado y el rector de un ínclita universidad dirigida por PPeros dice que sí. Quedan pocas dudas de que los favores han recorrido los ordenadores de la universidad y que tiene muy difícil convencernos de que es una de las beneficiarias. De momento parece que ha optado por el silencio mientras otros mienten o la llaman desmemoriada…
            No nos merecemos esto, esperemos que un título de un master no sirva para esconder otras muchas tropelías y corruptelas. AAAAhhhh no olvidemos, el mayor robo está en la forma de pagar impuesto las empresas del Ibex pero nadie lo denuncia porque dependen de sus dádivas y dominan los medios de comunicación. Hasta inclinan los votos a quienes ellos señalan…


           

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