NO LLEGA LA CALMA

Ya vivimos en el postureo de las siguientes elecciones…

Trapicheos en los pactos, mentiras desmentidas, poltronas a subasta.

Podían comenzar por ir cambiando leyes y el destino de los impuestos.

Gracias a quienes me felicitaron cuando hacía 70 años. Una sonrisa robaron.

                          

            Esperaba volver a escribir cuando se acabara el circo de las elecciones y entráramos en un periodo de calma pero no quieren que haya pausa. Volvemos a vivir en las medias verdades, en los pactos que prometieron no realizar, en el postureo para las próximas consultas, se hace eterna la composición de las cámaras y de los gobiernos y parece que todo puede esperar porque lo importante, las poltronas, ya están asignadas.

            Todos ganaron o si perdieron tuvieron otros la culpa. El PSOE no conquista, de momento, Madrid, y se queda perplejo por la influencia mediática de la capital. Sube como la espuma pero le queda el sabor amargo de tener que regalar cachos de poder a quienes les entronen en los gobiernos autonómicos o municipales.

            PODEMOS ha pagado alguna de sus ideas poco claras sobre los referéndums de autodeterminación en el resto de España y ha quedado en el alero la alcaldía de Barcelona. Errejón lo vio venir y se puso a un lado del camino, dividió a la izquierda, contribuyó a que el desastre fuera grande pero le dio un baño a Iglesias en las urnas. Una pequeña reflexión no les vendría mal a los dos.

            Respecto a Catalunya no cambiará nada en el futuro. Tenemos las autonómicas pendientes y el juicio en el día a día. Qué si vienen o se van a Bruselas en directo, qué si salen de la cárcel hacia Europa para tomar posesión de sus escaños… Prolongar la agonía cuando se necesita superar esa página con el menor dolor para las personas implicadas. Entretanto parece que ganaron los independentistas porque miraron los resultados de las europeas, se olvidaron de sumar los votos en Barcelona para ver la gran derrota que supuso para ellos en número de escaños o quizá es que yo sumo mal porque ya estoy jubilado.

            Gracias a quienes me robaron una sonrisa el día de mis 70 tacos. Es jodido hacerse mayor pero es muy gratificante ir disfrutando los años. Continuaré hablando con la luna porque estoy seguro que está muy sola porque nunca ser humano la ha visitado.