YA SE REUNIERON 

Cada uno se escuchó a sí mismo y dormirán tranquilos. 

El uno pensando en sus presupuestos diciendo medias verdades. 

El otro vendiendo humo pensando en las elecciones. 

        

Sánchez y Torra decidieron dar tregua a sus aspiraciones montando un numerito de cara a los telespectadores. Todos saben que es un diálogo de sordos donde lo importante es salir bonito en la fotografía, pero de ningún modo escuchar. Están tan distanciados sus planteamientos que nadie puede creer lo que nos cuentan sin sentirse engañado. 

Torra conoce perfectamente las limitaciones y recorrido de sus ideas porque ni la autodeterminación ni la amnistía forman parte de las intenciones de Sánchez. Si no las niega con la rotundidad de hace unos meses se debe a que necesita a Esquerra para aprobar unos presupuestos que den vida a un ejecutivo que carece de los votos necesarios. Torra sabe que ha llegado al final de su camino y debe luchar por mantener la presidencia para su partido esperando que fotografías como la de hoy le den votos cuando se ponga unilateral y victimista. 

Sánchez leyendo la Constitución en sus horas de insomnio, buscando comas y puntos para escapar a la agresividad de la ultraderecha, protagonizada por Casado, y a la vigilancia de los barones que no quieren ver mercadas sus arcas autonómicas por los detalles que siempre requieren los votos, votos de millones de euracos que son el precio de asegurarse un gobierno un poquito duradero. 

 El gobierno progresista se queda cojo, suspendido en el aire, con miedo a pasar cualquier línea que nos acerque a un país dónde la riqueza está mejor distribuida y las cargas fiscales sepan a algo parecido a la izquierda. Saben que Europa les vigila, pero también que hay un mar para navegar desde las medidas de Rajoy a las que ahora se pueden intentar. Dependen de votos a los que les importa un comino este surcar los mares, pero si el barco viene cargado de indultos y euracos puede comenzar a dejar dormir a Sánchez. 

¡Qué modositos los dos! ¡Qué tontitos nosotros escunchándoles!...